Se han ido a Burgos. Se alojan en el Palacio de Saldañuela a pocos kilómetros de la Capital.
Según nos informan han dormido muy bien, agotados por la intensidad de las actividades programadas para ellos.
Además de los tutores, un grupo de monitores les atienden y están pendientes de ellos día y noche.
La comida es suministrada por una empresa de catering.
El martes bajaron las temperaturas y por la tarde visitaron Burgos.
En la Catedral y el Castillo les felicitaron por el buen comportamiento y el interés mostrado.
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